sábado, 22 de marzo de 2008

V OL V E R. . .

La vida cambia.
¡Sí! Cambia todo el tiempo... C o ns t a n te me n t e. . . Es algo inevitable en el trayecto que la vida nos regala.
Estos días me he dado cuenta que muchas veces el hacer sufrir es sencillamente inevitable. El otro día, mientras sostenía una intensa conversación, después de un quierebre, alguien (a veces sabio) me dijo... "No es tu culpa. Todos saben en lo que se meten cuando se involucran en una relación... No te puedes hacer cargo del sufrimiento ajeno. No debes sufrir en vano". Y es cierto. A pesar de que la pena me invadió aquella noche, no cargaré con sufrimiento ajeno, aunque me duela el alma tener que decirlo. Autodestrucción es una de las palabras que se relaciona al término ya mencionado... "sufrimiento ajeno".
Es verdad que la verdad duele más al principio, pero ¿cuál es el punto en mentir? ¿porqué será qué la cobardía se apodera tan frecuentemente del hombre? Estoy tranquila conmigo misma, porque a pesar de que alguien hoy llora, hize lo que podemos denominar "correcto".
Hay tantas cosas que quiero volver a ser...
Volver a tener fe
Volver a ser yo misma
Volver a tener metas
Volver a jugárlamela por mis pasiones
Volver a sentir de corazón
Volver a creer en mis convicciones
Para ustedes, "Volver" de la película del mismo nombre de Almodóbar.
Estrella Morente - Penélope Cruz



Carolina.

domingo, 9 de marzo de 2008

El amor después del amor

“El amor después del amor”
(Esto lo quería postear ayer pero la página estaba con errores)
Sábado 8 de Marzo de 2008

“Giving up doesn't always mean you are weak; sometimes it means that you are strong enough to let go…”

Esa sabia cita me ha inspirado mucho últimamente. Sufrir es tan parte y propio de la vida humana.
Por estos días no lo he pasado nada de bien, porque en la noche, cuando el sol se esconde y me encuentro sola conmigo misma, debo enfrentar a este corazón.
Nunca realmente entendí lo que nos pasó. Cómo fue que se nos murió el amor. Pero así tan rápido y maravilloso como llegó, terminó en un mar de lágrimas misteriosas y fortuitas.
Por estos días me han dicho que no soy la misma de siempre. Es cierto, de hecho estoy sufriendo una gran mutación en mi vida. Lo peor de todo es que no se muy bien cómo enfrentarla. La vida cada día nos presenta un desafío nuevo, y a pesar de lo mucho que estoy sufriendo en este momento, debo levantarme y salir adelante con fe y esperanza.
Ayer se terminó definitivamente un ciclo de mi vida. Fue un para siempre. Su mirada me lo dijo todo. Sus ojos, víctimas de tanta melancolía insinuaron que esa historia tan anhelada por tantos minutos vividos, hoy llegaba a su fin definitivo.
“If I hurt you then I hate myself, I don’t want to hate myself, Don’t wanna to hurt you…” (Sister Hazel).
Odio pensar que estoy haciéndole daño a dos personas tan increíbles. A dos angelitos que llegaron a mi vida para alegrarla, acompañarla e iluminarla de maneras tan distintas. Personas que cambiaron drásticamente mi vida para bien. Que me enseñan, a pesar de todo, cada día algo nuevo, y que probablemente sin ellas, mi pasar en esta tierra sería mucho más plano e insignificativo. Y si es que el sufrimiento que estoy causando se devuelve, definitivamente la vida me está pasando la cuenta.
“The best way to mend a broken heart is time and girlfriends…”. Es exactamente lo que haré en este momento…

Por hoy, no hay más nada que decir.

Hasta Siempre,

Carolina.